Os dejo el texto que he escrito para El hogar de Luci de los perros mestizos. En El hogar de Luci y en el CICAM hay un montón de perros que cumplen estas características tan fantásticas del cruce de razas. Os dejo las páginas web y os animo a conocerlos.
¿Pensais vosotros como Revolver que la mezcla es la clave? Yo definitivamente si. ¿Para que íba yo a querer una hemofilia en la familia provocada por la maldita costumbre de reyes y reinas de aparearse con sus parientes? ¿Para que íba yo a querer un cuasi-calvo bigotudo, achaparraó y con vocecilla de pito abogando a diestra y siniestra por una "super raza" aria? Pues eso.
http://www.adoptacicam.org/ (tienen su propio texto sobre las ventajas de los perros mestizos)
"Soy mestizo de alma soy mestizo de menteaunque no lo demuestre el color de mi pieltodos somos mestizos hijos de padre y madre,¿quien no lo es?Si lo puro es lo neutro yo prefiero lo impuro la mezcla es la clave dame combinación no me cuentes milongas yo prefiero la vidaa todo color"
Así comienza la famosa canción de Revolver que da nombre al disco, Mestizo. Con estas líneas tomadas prestadas de este genial grupo queremos en El Hogar de Luci presentaros las ventajas de los perros que no son de raza contraponiéndonos a la fiebre que hay por adoptar un perro de raza "pura"
Para comenzar los mal llamados perros de raza "pura" no son más que mestizos prolongados en el tiempo.
Los perros mestizos tienen el conocido "Vígor Híbrido" que por lo que sabemos de genética hoy en día, la nueva información que aportan los congéneres se traduce en un individuo superior (nuestro querido chucho) que contará con las buenas características de sus padres aportando además un plus de resistencia a las enfermedades y un mayor grado de fertilidad. Es posible asimismo que nuestro querido chucho sea objeto de nuestros mimos y risas hasta una edad avanzada porque por supuesto nuestro nuevo "super chucho" es a menudo más longevo.
A lo largo de la historia, el ser humano ha tratado de reforzar genéticamente la raza de los individuos y de los animales cruzándoles con otros con parentesco o genética similar, dando lugar a enfermedades muy comunes de las razas "puras", propias de un mal cruce de individuos.
El perro mestizo ha logrado hacerse un hueco en nuestros corazones frecuentemente callejeando y sirviendo como fiel amigo al ser humano hasta el fin de sus días. En las tiendas que comercian con las vidas de estos amigos de incalculable valor, rara vez nos encontramos con un perro mestizo, si no que tratan de perpetuar además del tráfico de vidas, la leyenda urbana de que los perros de raza son mejores.
La inteligencia y la capacidad de comprensión de los animales mestizos son a menudo más altas que la de los perros de raza que cumplen desde hace siglos con su misión. Así que si bien los pastores alemanes hacen las veces de policias, los labradores de lazarillos y los San Bernardos de rescatadores de humanos despistados, también un cruce de estas razas podría servir a la causa igual de bien que su "noble" parentela.
También es notable la versatilidad que tienen para acomodarse a todo tipo de situaciones y a todo tipo de familias. El cariño que dan no se puede medir con un barómetro de razas , ni es necesario un papel que acredite que nuestro mejor amigo es de buena familia o de alta cuna, si con que nos coma a lametones, cuide de los niños y sea paciente con nuestras manías, a servidora por lo menos, le vale.
Somos incapaces de elaborar un perfil de mestizo, porque precisamente aquí radica otro de los encantos de estos chuchos a los que tanto queremos: son únicos e irrepetibles. Pensad en todas las combinaciones de razas distintas que se han producido a lo largo del tiempo, en distintos lugares y entre individuos - de la misma raza- con distinto carácter y obtendréis millares de estos ejemplares de chuchos amistosos, de chuchos que poco a poco van dejando la injusta fama de callejeros y pedigüeños para hacerse un sitio en nuestros sillones y corazones.
Así comienza la famosa canción de Revolver que da nombre al disco, Mestizo. Con estas líneas tomadas prestadas de este genial grupo queremos en El Hogar de Luci presentaros las ventajas de los perros que no son de raza contraponiéndonos a la fiebre que hay por adoptar un perro de raza "pura"
Para comenzar los mal llamados perros de raza "pura" no son más que mestizos prolongados en el tiempo.
Los perros mestizos tienen el conocido "Vígor Híbrido" que por lo que sabemos de genética hoy en día, la nueva información que aportan los congéneres se traduce en un individuo superior (nuestro querido chucho) que contará con las buenas características de sus padres aportando además un plus de resistencia a las enfermedades y un mayor grado de fertilidad. Es posible asimismo que nuestro querido chucho sea objeto de nuestros mimos y risas hasta una edad avanzada porque por supuesto nuestro nuevo "super chucho" es a menudo más longevo.
A lo largo de la historia, el ser humano ha tratado de reforzar genéticamente la raza de los individuos y de los animales cruzándoles con otros con parentesco o genética similar, dando lugar a enfermedades muy comunes de las razas "puras", propias de un mal cruce de individuos.
El perro mestizo ha logrado hacerse un hueco en nuestros corazones frecuentemente callejeando y sirviendo como fiel amigo al ser humano hasta el fin de sus días. En las tiendas que comercian con las vidas de estos amigos de incalculable valor, rara vez nos encontramos con un perro mestizo, si no que tratan de perpetuar además del tráfico de vidas, la leyenda urbana de que los perros de raza son mejores.
La inteligencia y la capacidad de comprensión de los animales mestizos son a menudo más altas que la de los perros de raza que cumplen desde hace siglos con su misión. Así que si bien los pastores alemanes hacen las veces de policias, los labradores de lazarillos y los San Bernardos de rescatadores de humanos despistados, también un cruce de estas razas podría servir a la causa igual de bien que su "noble" parentela.
También es notable la versatilidad que tienen para acomodarse a todo tipo de situaciones y a todo tipo de familias. El cariño que dan no se puede medir con un barómetro de razas , ni es necesario un papel que acredite que nuestro mejor amigo es de buena familia o de alta cuna, si con que nos coma a lametones, cuide de los niños y sea paciente con nuestras manías, a servidora por lo menos, le vale.
Somos incapaces de elaborar un perfil de mestizo, porque precisamente aquí radica otro de los encantos de estos chuchos a los que tanto queremos: son únicos e irrepetibles. Pensad en todas las combinaciones de razas distintas que se han producido a lo largo del tiempo, en distintos lugares y entre individuos - de la misma raza- con distinto carácter y obtendréis millares de estos ejemplares de chuchos amistosos, de chuchos que poco a poco van dejando la injusta fama de callejeros y pedigüeños para hacerse un sitio en nuestros sillones y corazones.