LAIKA o the space oddity
De Laika, la perra, todo se ha dicho. Muchos investigaron curiosos su historia. Dos grupos le han dedicado sus nombres en una forma simpática de no dejar su nombre en el olvido. Incluso The Cardigans, Arcade Fire y Mecano entre el cielo y el suelo la dedicaron una canción.
Los niños soviéticos construían naves espaciales de cartón donde metían a sus chuchos y los levantaban en volandas simulando el lanzamiento del Sputnik 2, que hasta dónde yo sé el Sputnik 1 debió ser un fiasco porque de éste ni se habla; como Apolo, que hasta el XII no se coló en nuestros hogares (anda mira como los Píos , que hasta el XII tampoco tuvimos muchas noticias de quienes eran)
El lanzamiento del Sputnik II se realizó en 1957, apenas dos años después de terminada la II Guerra Mundial, si aquella donde a la humanidad se le volvió a caer la poca vergüenza que le quedaba.
Ella era una perrita normal, caminando por las grises aceras de Moscú, sin saber que estaba en medio de una trepidante (algunos la tildan de genial y otros de absurda) carrera espacial entre EEUU y la URSS. Probablemente le gustasen los largos paseos, olisquear a la gente, leer a Dostoyevskien sus ratos libres y beber vodka después de merendar, pero seguro que no se esperaba que el hombre que la dió cobijo y un techo empezase a estrechar su hogar cada vez más…
Es especialmente duro el confinamiento de los animales durante hasta 20 días en espacios cada vez más pequeños. El entrenamiento es básico para que la misión espacial pueda llegar a tener cierto éxito. Así que someter al animal (no olvidemos que Laika no fue la única de su especie y que también experimentaron con primates) exponiéndolos a unas cantidades ingentes de estrés y trauma por encerramiento y condiciones extremas- simulador de gravedad y de la fuerza centrífuga de la capsula donde les metían- se hacía completamente necesario… ¿o no?
Desde que el hombre ha “colonizado” la tierra y todos sus habitantes, siempre los dominados han sido los no humanos, sirviendo éstos para los más diversos fines: alimentación, vestimenta, entretenimiento y experimentación. Lejos de querer entrar en debate de sí la experimentación en animales es ética (NO NEIN NET!) ya que esto es un homenaje a todos los usados por el hombre, recordaremos siempre la fecha de esta tragedia, que en maltrato animal nada tendría de especial si no fuera porque hizo historia. Ya se sabe, los anónimos no venden. Pónle nombre y una historia trágica y tendrás el show bien montado.
Además, Laika iba perfectamente preparada: con su bolsita adherida para los excrementos, su comida en forma de gelatina (su favorita también seguro) y un arnés muy especial que la sujetaba para que ni pudiera sentarse o tumbarse, ya que ¡claro! Aquello era el camarote de los hermanos Marx, sólo que sin ninguna sonrisa. Nadie sabe lo que experimentó Laika al sentir el mundo a sus pies pero lamentablemente los datos que llegaban a la base de sus constantes vitales desde luego no reflejaban el Nirvana.
El gobierno del país, divagó entre las diversas causas de muerte de la perrita, admitiendo en 2002 que ésta murió por un sobrecalentamiento de la nave a las pocas horas. En oratoria se nos enseña a camuflar la realidad, poniéndola el mejor traje de palabras bonitas que tengas. Los rusos lo llamaron sobrecalentamiento, yo lo llamo negligencia científica al no saber crear una temperatura regulada en tan poco tiempo. Lógico, lo hicieron en cuatro semanas, ya dije antes que era la carrera espacial, y no estaba bromeando. “Cuanto más tiempo pasa, más lamento lo sucedido. No debimos haberlo hecho... ni siquiera aprendimos lo suficiente de esta misión, como para justificar la pérdida del animal”
(Oleg Gazenko, uno de los principales científicos del programa de animales en el espacio, y entrenador de Laika)
En el Hogar de Luci hemos hecho nuestro aquello de “en el cielo hay una perra menos en el cielo una estrella más” que cantaba Ana Torroja y queremos dedicarnos desde ahora a plantar estrellas en el firmamento y flores en la Luna. Es tan sencillo como ahuecarle el colchón a Víctor, dar de comer a Rita o jugar con Grace.
“Laika miraba por la ventana, ¿Qué será aquella bola de color y qué hago yo girando alrededor?”
BIBLIOGRAFÍA